Después del uso de las vitaminas protegidas del complejo B nos dimos cuenta que las vacas estaban preñadas en menos días que el grupo sin vitaminas; para nosotros es de vital importancia la fertilidad ya que el preñar a las vacas en tiempo y forma es crucial.
También tuvimos un incremento en los sólidos de la leche, en específico la grasa, sin cambios en el consumo de materia seca; por lo tanto, al tener más producción de leche nuestros animales fueron más eficientes.